Impacto de la Igualdad Género en la Salud Global
¿Conocías que la igualdad de género puede influir en la salud de un país? Descubre cómo según un estudio reciente.
La búsqueda constante por alcanzar la igualdad de género ha mostrado tener un alcance que trasciende lo social, adentrándose en esferas tan fundamentales como la salud pública. Un estudio 'Determinantes Sociales de la Salud: abordaje desde la visión de la sociedad civil', realizado por el Consejo General de Colegios Farmacéuticos (CGCF), ha arrojado luz sobre este vínculo, revelando que un mayor grado de equidad entre los géneros se traduce en mejoras significativas en la salud de la población.
¿Cómo afecta la igualdad de género a la salud?
Según el informe, tradicionales patrones de masculinidad, que conllevan a decisiones perjudiciales para la salud de los hombres, y el papel que juegan las mujeres en el sistema de salud, son variables centrales que explican este fenómeno. A nivel europeo, España se posiciona en un lugar destacado en cuanto a igualdad de género en salud, pero hay ciertos ámbitos donde aún flaquea, situándose por debajo de la media continental.
El impacto de la igualdad de género en la salud no solo se percibe en la esperanza de vida o en condiciones más visibles. Las diferencias de género en el mercado laboral, caracterizadas por la temporalidad y la infravaloración salarial de las mujeres, crean un círculo vicioso de precariedad y malas condiciones de salud, tanto física como mental.
El rol de las mujeres en la sociedad y la igualdad de género
Este estudio también resalta la carga desproporcionada que asumen las mujeres en su rol de cuidadoras principales, lo cual tiene consecuencias directas en su bienestar. Este rol, considerado tradicionalmente como una 'obligación moral', repercute en su presencia en el mercado laboral y, por lo tanto, en su estatus socioeconómico, perpetuando la desigualdad.
En una reflexión más profunda, el análisis apunta hacia la brecha de género en la generación de conocimiento médico, donde las mujeres suelen ser excluidas de los ensayos clínicos debido a variaciones hormonales. Los ensayos clínicos, base de la ciencia médica, muestran así un sesgo considerable que necesita ser corregido para garantizar tratamientos adecuados para ambas mitades de la población.
La violencia de género
Finalmente, el informe aborda uno de los aspectos más alarmantes y destructivos: el impacto de la violencia de género en la salud. Las secuelas de la violencia y los abusos sexuales persisten y se multiplican, generando un abanico de problemas físicos y mentales. Además, las mujeres que han sufrido violencia tienden a requerir más servicios de emergencia y salud mental, redundando en una presión adicional al sistema sanitario.
El estudio concluye con un mensaje claro: la igualdad de género es un indicador crucial de salud pública, cuyas repercusiones van mucho más allá del ámbito social. Por tanto, fomentar la equidad de género no solo es una cuestión de justicia, sino también de salud y bienestar general. Es imperativo que las políticas de salud y género avancen de la mano para crear una sociedad más justa y saludable para todos.
